Programa de transformación del pajarillo
Semana 005 – Moverse como un bebé
Esta semana entraremos en contacto con nuestro cuerpo de una forma diferente. Comenzaremos a movernos. Quizás sería mejor decir que comenzaremos a movernos como solíamos hacerlo. Sé, que ya sabes cómo moverte. Te has movido toda tu vida, y tus músculos, tendones y huesos tienen un hábito particular. Tal vez incluso los ejercitas cada día con algunos ejercicios porque sabes que es beneficioso, o porque te gusta o te hace sentir mejor. Todo eso está bien.
Comenzaremos desde el principio otra vez, aprendiendo a movernos de nuevo con una atención especial. Las cosas podrían ralentizarse bastante.
Fingiremos que somos un bebé, sin agenda ni demandas, simplemente estando ahí, tan solo siguiendo los impulsos de nuestros cuerpos.
Si tienes en tu vida a un bebé de entre unos 4 o 6 meses, observa cómo se mueve. O mira el vídeo del final. Explora moverte como un bebé que no sabe cómo gatear aún. No camina, no se pone de pie. Puede mirar alrededor, unir sus manos, arquearse, inclinar su cabeza hacia atrás y a los lados, mover las piernas, girarse e impulsarse a sí mismo, quizás apoyarse con las cuatro extremidades, arrastrarse, pero no puede gatear aún.
Túmbate en una superficie confortable para ti. Si tienes una esterilla de yoga, eso irá bien también. Puedes poner alguna música suave, o no.
Túmbate, siente dónde tu cuerpo toca el suelo, después no hagas nada.
En algún momento, quizás quieras mirar alrededor, o mirarte las manos o hacer algunos movimientos según vayan viniendo. Juega con eso, siente las piernas, la espalda, los brazos, la cabeza, la nuca. Quizá quieras estirarte, o empezar a girar, o quizá casi nada de todo esto. Comienza escuchando tu cuerpo, y deja que tu cuerpo te diga dónde estirar, qué mover y dónde abrir. Deja que el impulso llegue y síguelo. Y recuerda, los bebés no juzgan cómo se mueven. Ellos también eructan, se tiran pedos, estornudan, tienen hipo, suspiran, lloriquean, lloran, sonríen, fruncen el ceño y se ríen según les venga.
Hazlo cada día durante tanto tiempo como quieras.
«Todo lo que sentimos y todo lo que nos sucede está en el cuerpo». Ángela Farmer
Para vivir una vida inspirada, debe haber un espacio interno para que la energía fluya. Cuanto más limpio esté el recipiente, más libremente fluye la energía. Si estamos tensos, llenos de estrés retenido, llenos de bloqueos de energía inconsciente y congelada, la energía no puede moverse y estamos estancados y estresados de forma crónica. Una cosa más que suceda puede estresarnos lo bastante como para explotar, tan solo para aliviar la presión.
Necesitamos sentir para sanar, necesitamos poder sentir nuestros cuerpos.
Disfruta el ejercicio de esta semana.
Vídeo:
Apéndice:
Para aquellos que deseen ir más allá en cuanto a sentir y escuchar su interior, tienen algunas opciones. Una es la más barata económicamente, consiste en practicar la escucha de los impulsos de tu cuerpo, tus sensaciones, la forma en que tu cuerpo dice «sí» o «no», su forma de decirte que hay un peligro, o de relajarse, a pesar de lo que tu mente te esté diciendo.
Si tienes intuición, este sentido de curiosidad puede ir más allá con un entrenador profesional. Más abajo hay tres métodos que merecen investigarse, y si tienes un buen profesional disponible en tu zona, pruébalos.
Experiencia somática: se centra en las sensaciones corporales percibidas (o experiencias somáticas). La creó el terapeuta de los traumas Peter A. Levine. Muy bueno para cualquier clase de trauma del pasado y dolor crónico que todavía estén retenidos en el cuerpo.
Hakomi: el Método Hakomi de psicoterapia experiencial es un acercamiento a la terapia centrada en el cuerpo desarrollada por Ron Kurtz. Yo combino la consciencia somática con las técnicas experienciales para promover el crecimiento psicológico y la transformación.
El método Feldenkrais: una invención del físico israelí Moshe Feldenkrais, es una forma de volver a entrenar el cuerpo. Hay dos modos de reentrenamiento. El primero son unas clases grupales llamadas «Toma de consciencia a través del movimiento» o ATM (Awareness Through Movement), clases grupales donde el instructor simplemente dice dónde él/ella está, sin tocar al participante o hacer demostraciones. El segundo modo: «Integración funcional» o FI (Functional Integration), es más capaz de producir mejoras considerables. Se hacen con un entrenador profesional en sesiones individuales. Permaneces completamente vestido sobre una mesa baja y el profesional mueve o presiona tu cuerpo suavemente en diferentes direcciones para hacerte consciente de las tensiones subconscientes y patrones estancados que hacen menos eficientes tus movimientos, y que puede ayudarte a aprender maneras más eficientes de coordinar tu cuerpo.
¿Existen otros métodos para ayudar a desarrollar este tipo de conciencia corporal, descubrir patrones y creencias estancados en el cuerpo? Los hay, pero no sé lo suficiente de ellos para poder recomendarlos.